¿Qué es un ETF o Fondo cotizado?

En el mundo del dinero es muy común que de vez en cuando salga algún producto financiero nuevo, o que alguno que ya existiese, de repente, aparezca en el primer plano de la actualidad debido a campañas comerciales de los bancos u otras entidades financieras. Te puedo decir unos cuantos ejemplos. Preferentes, depósitos estructurados, fondos de inversión garantizados, CFDs, seguros de ahorro etc. ¿A que te suena alguno de ellos? 

Siempre tienes que ir con cuidado con estos productos que se ponen de moda, o por lo menos informarte bien antes de contratarlos, porque con el que no acabas perdiendo dinero lo más probable es que pierdas el tiempo.

Uno de los productos financieros que durante la última década sí que han tenido éxito, y siguen teniendo, son los ETF. Si te planteas invertir en bolsa que menos que conozcas este tipo de producto de inversión porque es una opción más que interesante.

Te explico qué es un ETF a continuación.

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¿Qué son los ETF?

ETF son las siglas de tres palabras en inglés, Exchange Traded Fund. En castellano se llama Fondo Cotizado, pero se le hace referencia como ETF de manera habitual.

Los ETF son Instituciones de Inversión Colectiva (IIC) de carácter financiero.

Concretando.

Un ETF es un fondo de inversión, como cualquier otro, compuesto por una cesta de valores. Son muy parecidos a los fondos índice al no tener una gestora que se dedique a batir a su índice de de referencia.

Lo que hace la gestora de un ETF es copiar la composición de un índice bursátil para seguir su evolución, de manera que obtiene la misma rentabilidad que su índice de referencia o benchmark.

Por esta razón se dice que son de gestión pasiva o de gestión indexada.

¡Atención!

No todos los ETF que existen son de gestión de pasiva, pero sí la gran mayoría.

¿Cuál es la principal característica de un ETF?

Los ETF tienen características de los fondos de inversión y también de las acciones. Son como una mezcla de un fondo de inversión y una acción. Pero su principal característica no la comparte con ningún otro tipo de fondo de inversión, y es la siguiente.

Las participaciones de un ETF son negociadas en el mercado a lo largo de una sesión bursátil como se si se tratase de una acción. Se puede comprar y vender las participaciones en el momento con una simple operación de compraventa de bolsa, al precio que tenga en ese momento la participación. Todo ello a través de un broker.

En cambio, con cualquier otro tipo de fondo de inversión, solo se puede comprar o vender las participaciones a la entidad gestora al final de la sesión bursátil, una vez calcule ésta el precio liquidativo de la participación.

Pero tienen más características.

Otras características de los ETF

Otra característica importante de un ETF es la liquidez. Esta particularidad lo convierte en un instrumento ideal para invertir en bolsa. Y es que ésta es una condición más que necesaria para que todos los activos que cotizan en cualquier mercado financiero lo hagan de una manera eficaz.

Además, un ETF también comparte características con los fondos de inversión, en concreto de los fondos índice.

¿Qué es la liquidez?

La liquidez es la facilidad que tiene un activo para convertirse en dinero.

Estas son alguna de ellas:

  • Inversión global, ofrecen la posibilidad de invertir en cualquier mercado del mundo.
  • Diversificación, cuando se adquiere una participación de un ETF que replica un índice, se está comprando todos los valores que componen su índice de referencia.
  • Dividendos, la gestora del ETF, en función de su política de inversión, puede pagar a los partícipes, repartiendo los dividendos e intereses que distribuyen los títulos que componen el fondo (fondo de distribución), o reinvertirlos en el ETF haciendo aumentar el valor de la participación (fondo de acumulación).
  • Menores gastos y comisiones, los ETF al ser de gestión pasiva, los gastos y comisiones son menores que las de un fondo de inversión tradicional y también mucho menores que si se compran todos los valores del índice de referencia por separado.

Los ETF son elementos importantes dentro de una cartera de inversión de gestión pasiva, y también son muy útiles para aquellos inversores que hagan lo contrario, es decir, una gestión activa de su cartera.

Con ellos se pueden especular, realizando rápidas operaciones de corto plazo o trading con la misma facilidad que se haría con acciones. Pero esto es más para valientes.

ETFs: Tema fiscal

Los ETF comparten muchas características con todos los tipos de fondos de inversión que existen, en especial con los fondos índice, pero entre ellos existen ciertas diferencias. Una ya te la he comentado antes, que es la forma de comprar y vender las participaciones. La otra es el tema fiscal. Los ETF no poseen la ventaja fiscal que tienen los fondos de inversión. Y esta es una de las cosas que menos me gustan.

Con los fondos de inversión se paga impuestos por los beneficios cuando se venden las participaciones. Por tanto el beneficio está sujeto a retención como ocurre con los depósitos a plazo fijo, pero tienen la ventaja de que se pueden hacer traspasos entre ellos sin tener que pagar a Hacienda por los beneficios que haya acumulado. Los impuestos se pagan cuando se recupera la inversión para disfrutar del dinero.

En resumidas cuentas, con los traspasos de fondos de inversión se está difiriendo o atrasando el pago de impuestos, cosa que no ocurre con los ETF.

Con los ETF no se puede hacer traspasos entre ellos. Para pasar el dinero de un ETF a otro, primero hay que vender uno para después comprar el otro. No hay otra opción. Y en caso de que se tenga beneficios en el ETF que hay que vender, toca pasar por Hacienda. Pero en este caso, no se paga impuestos en el momento de la venta, sino que, como ocurre con las acciones, se tributa por los beneficios cuando se hace la declaración de la Renta.

Como ves, al contrario de lo que ocurre con los fondos de inversión tradicionales, los ETF no pueden ser traspasados y los beneficios no están sujetos a retención.

¿Cuál es la evolución de los ETF?

Los ETF son productos financieros que, como hacía Miguel Induráin en una contrarreloj, han ido de menos a más. O mejor dicho, van a más. Surgieron en EEUU a mediados de la década los 90 y cada vez son más demandados por los inversores.

Observa qué ha pasado en los últimos diez años con el número de ETFs que existen.

Evolución ETF

En la actualidad, según etfgi.com, hay alrededor de unos 4.400 de ETFs diferentes. Y el número aumenta año tras año de una manera importante, también el valor de activos gestionados (en billones de dólares). Aunque la mayor parte de los que existen invierten en EEUU y Europa, hay ETFs que lo hacen en cualquier mercado y en cualquier región del mundo.

En etfdb.com puedes comprobar todas las clases de ETF que existen. Además de por la zona geográfica donde invierten, también puedes clasificarlos por los activos donde lo hacen, por su forma de gestión, etc.

Eso sí, ¡aléjate de cualquier ETF inverso o apalancado! y antes de hacer nada con algún ETF consulta su folleto informativo.

¿Qué es el folleto informativo?

El folleto informativo de un ETF es el documento que contiene información sobre el fondo cotizado. Entre otras cosas aparece el objetivo del fondo, indice de referencia, política de inversión, identificación de la gestora y la entidad depositaria, comisiones y gastos, fiscalidad etc.  Aquí un ejemplo.

Concluyendo sobre los ETF

Si te digo que los Exchange Traded Funds son mi producto de inversión preferido te miento.

Un ETF (Exchange Traded Fund) o Fondo Cotizado es un fondo de inversión de gestión pasiva cuyas participaciones tienen el mismo funcionamiento que las acciones. También tiene características de un fondo de inversión tradicional, en especial de los fondos de índice por replicar un índice bursátil. Pero a diferencia de lo que pasa con un fondo, un ETF no puede ser traspasado y cuando se venden las participaciones, los beneficios están sujetos a retención.

En mi opinión, para un inversor a largo plazo en índices bursátiles, los ETF parten con desventaja con los fondos índice por el tema fiscal.

Pero por contra, dada la escasa oferta de fondos índice que hay en España, los ETF cuentan con un abanico más amplio de posibilidades donde elegir y también tienen comisiones más bajas que los fondos índice, que ya de por sí son bastante más bajas que las de un fondo de inversión de gestión activa.

En definitiva, un ETF es un instrumento perfecto para diversificar tu cartera de inversión dependiendo de tus necesidades y objetivo a largo plazo.

Si quieres saber qué es un ETF de una forma más práctica te recomiendo que leas: SPY: El ETF más importante del mundo.

Si tienes alguna duda o sugerencia no dudes en dejar un comentario más abajo.

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"En el corto plazo el mercado es una máquina de votar, pero en el largo plazo es una báscula" - Benjamin Graham

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Sergio Yuste Teruel

Sergio Yuste gestionpasiva.com

Asesor Financiero, asociado nº 13228 de EFPA (European Financial Planning Association).

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  • En mi opinión, el problema real de los ETF es como tu dices, que tienen impacto fiscal. La mejor alternativa en este caso es invertir a través de fondos índice que son muy similares, gozan de todas las ventajas de las ETFS y además no tienen impacto fiscal, . Actualmente hay gestores automatizados en España que los comercializan a muy bajo coste. En mi caso, yo los descubrí hace un año a través de Finizens.

  • Hola Gabriel,

    Está bien como lo pongo. Lo que quiero decir es cuando vendes un ETF Hacienda no te retiene parte de los beneficios en concepto de impuestos. Los pagas al año siguiente una vez haces la declaración de la Renta.

    Gracias por comentar!

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